Una vieja creencia sostenía que existía una relación entre los meses y los signos zodiacales, entre las piedras y las estaciones...
ENERO: era favorable al Granate que presagiaba la fidelidad
FEBRERO: prefería la amatista, protectora de las pasiones violentas y signo de sabiduría.
MARZO: postulaba el diaspro sanguino( se llamaba asi a la hematite) emblema de coraje y talismán que apelaba a la prudencia y acompañaba todas las actividades peligrosas.
ABRIL: era un mes para los avaros ya que exigía el Zafiro o el Diamante. El primero simbolizaba la afección y el segundo la constancia.
MAYO: era un mes lleno de promesas que la hermosa Esmeralda delcolor de la esperanza lograba que se cumplieran
JUNIO: iba asociado al Agata, que daba el estado de salud perfecto.
JULIO: combinaba dos piedras el Rubí y la Cornalina. Estas aportaban resignación o indiferencia filosófica en cuanto a los problemas de la existencia, relegados gracias al sol todopoderoso durante este mes de intenso calor a las brumas del invierno (hemisferio norte)
AGOSTO: prefería el Sardónice, que contribuía a la felicidad familiar.
SEPTIEMBRE: significaba el final del verano, por lo que gracias a la Crisolita, se preservaban de la melancolía del final de la estación.
OCTUBRE: se apoyaba en la Aguamarina para recuperar las esperanzas y en el ópalo, que dispensaba valentía frente a las sorpresas que reservase el futuro.
NOVIEMBRE: se iluminaba con el cálido Topacio para reforzar los últimos rayos de sol.
DICIEMBRE. ensalzabaa uno de los mejores portadores de fortuna, el verde turquesa, saludable talismán para los marinos que debían enfrentarse a las tempestades y para los caballeros y jinetes.
FUENTE: La Magia de las Piedras Preciosas. Hettie-Henriette Védrine.
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