viernes, 1 de julio de 2011

Él me empuja por todos los escenarios de mi vida

Sólo me queda ya tiempo para la Eternidad: EL AMOR.

Él me empuja por todos los escenarios de mi vida
Él me hace mover de un lado a otro
Él me inmoviliza en su éxtasis
Él es lo único que me permite seguir adelante
Él lleva un paso tan rápido a veces, que tengo que sujetarme bien
para no caer...
Sólo quiero bogar sin tregua sobre su corriente
y sólo atino ya a sentir una cosa:
Permanecer en su fuego
que me abrasa
me purifica
y me eleva...http://www.youtube.com/watch?v=H23dkWysbcc&feature=player_embedded#at=208




Me llamo AMOR



Cuando, las horas de desaliento te invadan el alma, y las lágrimas afloren en tus ojos,
Búscame:
YO SOY AQUEL que sabe consolarte y pronto se
detienen tus lágrimas.

Cuando desaparezca tu ánimo para luchar en las dificultades de la vida, o sientas que estas pronto a desfallecer,

Llámame:
YO SOY LA FUERZA capaz de remover las piedras de tu camino y sobreponerte a las adversidades del mundo.


Cuando, sin clemencia te encontraras, de suerte que no encontraras donde reclinar tu cabeza,

Corre junto a mi:
YO SOY EL REFUGIO, en cuyo seno encontrarás guarida para tu cuerpo, y tranquilidad para tu espíritu.


Cuando te falte la calma, en momentos de gran aflicción, y te consideres incapaz de conservar la serenidad de espíritu,

Invócame:
YO SOY LA PACIENCIA que te ayudará a vencer las dificultades más dolorosas y triunfar en las situaciones más difíciles.


Cuando te debatas en los misterios de la vida y tengas el alma golpeada por los obstáculos del camino,
Grita por mi:

YO SOY EL BÁLSAMO que cicatrizará tus heridas y aliviara tus
padecimientos.

Cuando el mundo sólo te haga falsas promesas y creas que ya nadie puede
inspirarte confianza,

Ven a mi:
YO SOY LA SINCERIDAD, que sabe corresponder a la franqueza de tus actitudes y a la nobleza de tus ideas.


Cuando la tristeza o la melancolía intenten albergarse en tu corazón Clama por mi:
YO SOY LA ALEGRÍA que te infunde un aliento nuevo y te hará conocer los encantos de tu mundo interior.


Cuando, uno a uno, se destruyan tus ideales más bellos y te sientas desesperado,

Apela a mi:
YO SOY LA ESPERANZA que te robustece la Fe.


Cuando la impiedad te revele las faltas y la dureza del corazón humano,
Aclámame:

YO SOY EL PERDÓN, que te levanta el ánimo y promueve la
rehabilitación de tu alma.


Cuando dudes de todo, hasta de tus propias convicciones, y el escepticismo te aborde el alma,
Recurre a mi:

YO SOY LA FE que te inunda de luz y de entendimiento para que alcances la FELICIDAD.


Cuando ya nadie te tienda una mano tierna y sincera y te desilusiones de los sentimientos de tus semejantes,

Aproxímate a mi:
YO SOY LA RENUNCIA que te enseñará a entender la ingratitud de los hombres y la incomprensión del mundo.


Y cuando al fin, quieras saber quién soy, pregúntale al río que murmura, al pájaro que canta, a las estrellas que titilan.


YO SOY LA DINÁMICA DE LA VIDA, Y LA
ARMONÍA DE LA NATURALEZA.


¡ME LLAMO AMOR!...


¡SOY EL REMEDIO PARA TODOS LOS MALES QUE
ATORMENTEN TU ESPÍRITU!...

"Al hombre se le puede arrebatar todo, salvo una cosa: La última de las libertades humanas- la elección de la actitud personal que debe adoptar frente al destino- para decidir su propio camino



No eres Tú, soy Yo...

¿Quién te hace sufrir? ¿Quién te rompe el corazón? ¿Quién te lastima? ¿Quién te roba la felicidad o te quita la tranquilidad? ¿Quién controla tu vida?... ¿Tus padres? ¿Tu pareja? ¿Un antiguo amor? ¿Tu suegra? ¿Tu jefe?... Podrías armar toda una lista de sospechosos o culpables. Probablemente sea lo más fácil. De hecho sólo es cuestión de pensar un poco e ir nombrando a todas aquellas personas que no te han dado lo que te mereces, te han tratado mal o simplemente se han ido de tu vida, dejándote un profundo dolor que hasta el día de hoy no entiendes.Pero ¿sabes? No necesitas buscar nombres. La respuesta es más sencilla de lo que parece, y es que nadie te hace sufrir, te rompe el corazón, te daña o te quita la paz. Nadie tiene la capacidad al menos que tú le permitas, le abras la puerta y le entregues el control de tu vida.Llegar a pensar con ese nivel de conciencia puede ser un gran reto, pero no es tan complicado como parece. Se vuelve mucho más sencillo cuando comprendemos que lo que está en juego es nuestra propia felicidad. Y definitivamente el peor lugar para colocarla es en la mente del otro, en sus pensamientos, comentarios o decisiones.Cada día estoy más convencido de que el hombre sufre no por lo que le pasa, sino por lo que interpreta. Muchas veces sufrimos por tratar de darle respuesta a preguntas que taladran nuestra mente como: ¿Por qué no me llamó? ¿No piensa buscarme? ¿Por qué no me dijo lo que yo quería escuchar? ¿Por qué hizo lo que más me molesta? ¿Por qué se me quedó viendo feo? y muchas otras que por razones de espacio voy a omitir.No se sufre por la acción de la otra persona, sino por lo que sentimos, pensamos e interpretamos de lo que hizo, por consecuencia directa de haberle dado el control a alguien ajeno a nosotros.Si lo quisieras ver de forma más gráfica, es como si nos estuviéramos haciendo vudú voluntariamente, clavándonos las agujas cada vez que un tercero hace o deja de hacer algo que nos incomoda. Lo más curioso e injusto del asunto es que la gran mayoría de las personas que nos "lastimaron", siguen sus vidas como si nada hubiera pasado; algunas inclusive ni se llegan a enterar de todo el teatro que estás viviendo en tu mente.Un claro ejemplo de la enorme dependencia que podemos llegar a tener con otra persona es cuando hace algunos años alguien me dijo:"Necesito que Pedro me diga que me quiere aunque yo sepa que es mentira. Sólo quiero escucharlo de su boca y que me visite de vez en cuando aunque yo sé que tiene otra familia; te lo prometo que ya con eso puedo ser feliz y me conformo, pero si no lo hace... siento que me muero".¡Wow! Yo me quedé de a cuatro ¿Realmente esa será la auténtica felicidad? ¿No será un martirio constante que alguien se la pase decidiendo nuestro estado de ánimo y bienestar? Querer obligar a otra persona a sentir lo que no siente... ¿no será un calvario voluntario para nosotros?No podemos pasarnos la vida cediendo el poder a alguien más, porque terminamos dependiendo de elecciones de otros, convertidos en marionetas de sus pensamientos y acciones.Las frases que normalmente se dicen los enamorados como: "Mi amor, me haces tan feliz", "Sin ti me muero", "No puedo pasar la vida sin ti", son completamente irreales y falsas. No porque esté en contra del amor, al contrario, me considero una persona bastante apasionada y romántica, sino porque realmente ninguna otra persona (hasta donde yo tengo entendido) tiene la capacidad de entrar en tu mente, modificar tus procesos bioquímicos y hacerte feliz o hacer que tu corazón deje de latir.Definitivamente nadie puede decidir por nosotros. Nadie puede obligarnos a sentir o a hacer algo que no queremos, tenemos que vivir en libertad. No podemos estar donde no nos necesiten ni donde no quieran nuestra compañía. No podemos entregar el control de nuestra existencia, para que otros escriban nuestra historia. Tal vez tampoco podamos controlar lo que pasa, pero sí decidir cómo reaccionar e interpretar aquello que nos sucede.La siguiente vez que pienses que alguien te lastima, te hace sufrir o controla tu vida, recuerda: No es él, no es ella...ERES TÚ quien lo permite y está en tus manos volver a recuperar el control."Al hombre se le puede arrebatar todo, salvo una cosa: La última de las libertades humanas- la elección de la actitud personal que debe adoptar frente al destino- para decidir su propio camino"