sábado, 25 de diciembre de 2010

Especial Deepak Chopra

Especial Deepak Chopra

Entrevista al Dr. Deepak Chopra

Autor de “Reinventar el cuerpo. Resucitar el alma”

Por Alberto D. Fraile Oliver
Si hay que buscar un icono de la medicina alternativa y de la unión entre las visiones occidentales y orientales probablemente será Deepak Chopra. Este médico indio-californiano ha  llevado la filosofía de la India a los grandes públicos occidentales y ha popularizado la meditación y la medicina holística. Recientemente ofreció una conferencia en Palma. Entre otras cosas habló de la transformación personal, el poder de la mente, el miedo a la muerte  y de la “fórmula de la felicidad” cuyo secreto pasa por hacer felices a los demás. En esta entrevista habla de todo ello.
¿Creamos nuestra propia realidad?
Sí. Este mundo es un espejo de nuestra consciencia. No puedes verte a ti mismo sin un espejo, y este mundo es nuestro espejo. El espejo de la consciencia es el mundo que nos rodea.
¿Tiene algún sentido tratar de cambiar el mundo?
Si no me gusta lo que me ocurre, no hay remedio externo, solo es posible un cambio en la conciencia interna. Todas las relaciones son un espejo. Aquellos a los que amamos y aquellos que no nos gustan, son espejos. A través del espejo de las relaciones podemos ampliar nuestra conciencia. Nos atraen las personas en las que encontramos rasgos que queremos tener en nosotros mismos. Y no nos gustan las personas que tienen rasgos que negamos en nosotros mismos. Al pasar a una conciencia más elevada a través de reconocer el espejo de las relaciones reconoceremos que la atención y la intención son los propulsores de la transformación. Aquello donde ponemos nuestra atención, existe. Aquello donde quitamos nuestra atención, desaparece. La atención se convierte en energía que crea las cosas y la intención se convierte en transformación. Estos son los dos aspectos de la conciencia que empleamos para manifestar. A medida que empezamos a hacer esto experimentamos la realización sin esfuerzo.
No es nuestro trabajo cambiar la percepción o nivel espiritual de otros, pero si que podemos controlar nuestro propio progreso espiritual.
¿Estamos en el mundo o el mundo está en nosotros?
La experiencia habitual nos da la sensación de que existimos en el Universo, de que tú existes en algún lugar en el mundo. Eso es una mentira. La verdad es que todo el mundo existe en nosotros. El cuerpo y la mente existen en nosotros. El cuerpo, la mente y el mundo me ocurren. Tengo la mente y  de la mente proyecto el cuerpo y del cuerpo proyecto el mundo. Es mi conciencia quien construye el mundo. Tú no estás ahí sino que estás en mi conciencia y yo estoy en tu conciencia. El lugar en el que yo estoy en tu conciencia y el lugar en el que tú estás en mi conciencia es el mismo lugar. No existes tú como un cuerpo físico allí fuera. Mi cerebro me permite verlo, pero mi cerebro no tiene una experiencia directa del mundo. Lo único que hace mi cerebro es responder a la electricidad, a lo químico, a las hormonas… y todo eso te crea a ti allí fuera. Pero tanto yo que te creo a ti como tú que me creas a mí, somos una conciencia que está experimentando con las formas y fenómenos.
O sea, que todo está conectado.
Cuando veas algo piensa: “eso está en mi. Esos árboles que están allí fuera son mis pulmones. Si ellos no respirasen yo no respiraría y si yo no respirase, ellos no respirarían”. La Tierra es nuestro cuerpo físico, la atmósfera es nuestra respiración, las aguas son nuestra circulación. No es cierto eso de que yo estoy aquí y el mundo está allí afuera. Tenemos un cuerpo personal y un cuerpo universal y los dos son nuestros, tanto uno como el otro. Cuando nos damos cuenta de que el mundo está en nosotros, tenemos con él una relación íntima. Además podemos tener un conocimiento íntimo del mundo, y a partir de este conocimiento alcanzamos la paz con el mundo. A partir de la paz reconocemos que el mundo, el universo, es un ser consciente. Es nuestro cuerpo extendido. Cuando somos tan íntimos con nuestro cuerpo extendido como lo somos con nuestro cuerpo personal nos habla, nos podemos comunicar. Cuando entramos en comunión como un ser conciente nos sorprende con dones en forma de sincronías y de coincidencias con significado.
¿Qué significa estar sano?
El bienestar incluye el aspecto físico, espiritual, económico, social, comunitario y medioambiental. Es una experiencia holística. No creo que podamos estar realmente bien si no está bien el organismo en su totalidad. Nos hemos de considerar parte del ecosistema y del medio ambiente. Si hay contaminación en el atmósfera, lo hay también en tu cuerpo porque se recicla en tus células. Hemos de cambiar nuestro enfoque respecto a nuestra comprensión de la salud. La salud es algo sagrado.
¿Hay un receta para ser feliz?
La felicidad tiene tres componentes. El primero se remonta a la infancia. Las personas felices tienen un condicionamiento cerebral que viene de los primeros años de vida, y que les permite ver oportunidades, donde otros ven problemas. Este condicionamiento del cerebro aporta cerca del 50% de la experiencia de felicidad.
El segundo componente son los bienes materiales y la cantidad de dinero que una persona posee, aportan aproximadamente el 10% de su experiencia de felicidad total. El restante 40% proviene de las decisiones que tomamos cada día. Si las opciones son solo para el placer añadirán muy poco a la felicidad, pero si las decisiones que tomamos dan lugar a la expresión creativa o a mejorar la calidad de nuestras relaciones, entonces seremos una persona más feliz. De hecho, las investigaciones demuestran que la forma más fácil de ser feliz es hacer feliz a alguien. Si quiere tener éxito en la vida, cree las condiciones para que otras personas puedan tener éxito. Se pueden conseguir todos los deseos personales haciendo felices a otras personas.
¿Ese 50% que hemos heredado de la infancia no lo podemos cambiar? ¿Qué hacemos con esas creencias que nos limitan?
Podemos cambiar las creencias que nos están limitando a través de la reflexión, es decir, cuestionar las creencias que nos limitan, y por supuesto la meditación. Tienes que preguntarte si esta creencia está basada en algo verdadero o no, y porqué pienso que es la verdad? ¿Podría ser que no sea la verdad? ¿Qué efecto tiene el apego a esta creencia? ¿Quién sería yo sin esta creencia? ¿Cuál es el opuesto de esta creencia, podría ser más verdadero? Esta es la base de las terapias cognitivas. Las creencias vienen de las religiones, las culturas, la historia, el adoctrinamiento social.
¿Cuál es la importancia de la belleza en nuestras vidas?
La belleza y el diseño son expresiones de la naturaleza. La belleza es lo que ve un artista cuando mira hacia dentro y luego echa la mirada hacia fuera y ve un reflejo de lo que está en el interior. Creo que en el futuro tenemos que combinar la belleza, el diseño y la creatividad con el comercio porque todo el comercio que hemos visto hasta ahora partía de la explotación. Los ricos explotaban a los pobres para crear negocio, y esto se está derrumbando ahora. El futuro del comercio reside en la justicia social, la eliminación de disparidades económicas, la sostenibilidad, resolución de conflictos y la belleza entendida como una expresión de la naturaleza. Esto creará una nueva economía en el futuro, ¡espero! Porque sino estamos acabados…
¿Qué podemos hacer para evitar el cataclismo?
La única manera de resolver los problemas del mundo es dar a las personas herramientas para crear su propio bienestar. También se pueden utilizar estas herramientas para fabricar el éxito en la vida. Es menos probable que una persona que sea feliz recurra a la injusticia social o se convierta en terrorista. Si la gente está contenta con lo que hace, físicamente bien, financieramente segura y participando en la red social de su comunidad, entonces no va a estar contribuyendo en los problemas del mundo. Vivimos en un mundo donde el 50% de la población sobrevive con menos de dos dólares al día. Y el 20% con menos de un dólar al día. Mientras existan disparidades económicas de este tipo, darán lugar a los grandes conflictos, las guerras, las injusticias sociales y la insostenibilidad, donde los ricos se hacen más ricos y los pobres más pobres.  Las causas más profundas de la inestabilidad mundial se encuentran en el comportamiento egoísta de los países más ricos.
¿Crees que lo que hará que se produzca un cambio en el mundo será una revolución interior?
Es la única forma. No hay otra manera.
¿Qué piensas de los cambios sociales que están sucediendo en este momento?
Son momentos muy interesantes; todo se está derrumbando.  El sistema económico, catástrofes naturales que afectan a todos. Si había una erupción volcánica en Islandia hace unos 100 años, no tenía importancia. Pero hoy afecta al mundo entero. Es la economía que sufre, se cancelan los vuelos a Europa, la economía europea sufre, los aeropuertos pierden millones… todo por el volcán, en unos pocos días. La economía de Europa afecta la economía de América, que luego afecta la de China e India, y pronto tenemos al mundo entero afectado por el volcán. Fíjate en los problemas económicos de Grecia, Afganistán y Pakistán, también afectan al mundo entero. Ahora, más que nunca, tenemos que darnos cuenta que los problemas de los demás también son los míos, no hay otra forma. Los problemas de Afganistán no solo afectan a mi vecino, me afectan a mi. Tengo que cuidar a mi vecino.
¿Crees que nos dirigimos hacia una civilización empática?
Eso espero. Porque es lo único que puede funcionar. Ahora mismo somos totalmente interdependientes; económicamente y de cualquier otra forma. No hay otra solución: si no cultivamos la justicia social y una reforma económica en la que las diferencias entre ricos y pobres no incrementan, sino que se van reduciendo, si no cuidamos el medio ambiente, si no aprendemos a resolver los conflictos pacíficamente. Las guerras ahora ya no tienen ningún sentido, si China depende de los EE.UU. para su economía, ¿qué puede solucionar una guerra? Todos dependen de los demás, las guerras son obsoletas. Si un país deja de gastar dinero en asuntos militares y empieza a gastarlo en infraestructuras, el resultado es una economía mejorada.
¿Cómo podemos conectar la mente con el corazón?
¡Ya están conectados! (risas)
¿Y cómo podemos recordarlo?
La meditación, la compasión, ayudar a los demás, todo esto nos reconecta. El budismo habla de cuatro cualidades: la amabilidad, la compasión, la alegría (de los éxitos propios y ajenos) y la paz mental. Cuando nutrimos esta cualidades en la consciencia, se reconectan el corazón y la mente.
¿Cuál es el secreto de la meditación?
La clave está en la constancia, practicar regularmente. Disciplina y diligencia. Pasar 20-30 minutos o más cada día, aunque no tengas ganas lo haces. Pronto tu cuerpo te lo empieza a pedir. Yo medito una hora y media temprano, cada mañana.
¿Qué nos pasa cuando morimos?
Lo que llamamos muerte no es más que un salto cuántico de la creatividad del ser. El universo se enciende y se apaga constantemente a nivel subatómico, a nivel molecular, a nivel de los órganos. El Universo se recrea en sí mismo, estamos constantemente muriendo para recrearnos. Si algún día tuviéramos éxito para conquistar la muerte el Universo se momificaría, se quedaría estático. Es a través de la muerte como el universo se actualiza y se renueva a sí mismo. Solamente hay unas células en nuestro cuerpo que no mueren: las células cancerígenas. Esas células han olvidado como morir. Si entendemos la muerte entenderemos la vida. La muerte es el apagado y el nacimiento, el encendido. Por cada apagado hay un encendido. Si muriéramos y no nos recreáramos, seríamos la única excepción en el universo entero.
¿Cómo podemos superar el miedo a la muerte?
El miedo a la muerte se debe a la falsa identidad. La falsa identidad es el yo aislado. El yo aislado es una alucinación, no existe. Cuando superas la separación del ego, entras en una identidad transpersonal en la que no hay muerte. Eres esta persona, como un patrón no permanente del universo. Solo existe lo universal, todo lo demás es un reciclaje del universo. Si mueves tu personalidad a nivel universal, te liberas del miedo a la muerte.
¿En qué se diferencia la mente del alma?
La mente siempre es una conversación, el alma es una presencia. A esa presencia llega el pensamiento pero luego se va. En esa presencia, llega una sensación o un sentimiento y luego se va. En esa presencia, puede llegar una experiencia del mundo y luego se va. Todo llega y todo se va. Solo queda la presencia. Esa presencia se conoce como una conciencia testigo, estaba ahí cuando nacimos, la personalidad llega luego y se va. Cuando éramos adolescentes teníamos un cuerpo, una mente y una personalidad diferentes, pero la presencia era la misma. Todo eso llegó y se fue en esa conciencia testigo.
Todo es vibración. ¿Qué implica esto?
Todo es vibración, esto implica que cuando cambias tu vibración, cambias la vibración del mundo. Es la única forma de cambiar el mundo, como dijimos antes que el mundo es un espejo. Pero lo más importante en saber que todo es vibración, es que significa que todo se enciende y se apaga. Si ponemos la atención en el ON de la vibración, todo es información y energía. Pero ¿qué hay entre el ON y el OFF? Lo importante no es la vibración, sino lo que hay entre la vibración: es consciencia. Es un campo de posibilidades, un campo de creatividad, un campo de inmortalidad. El secreto del universo no está en la vibración, sino en lo que hay entre la vibración, en el vacío. La palabra técnica para describir esto es discontinuidad.
Debemos transformarnos a nosotros mismos pero ¿de qué manera y en qué dirección?
En el sentido de un despertar a una conciencia más elevada. Despertando también la intuición, creatividad, visión más elevada, comprensión de la unión inseparable entre el cuerpo y la mente. Esto se consigue a través de la sanación de las emociones y del cuerpo físico.
Somos la especie de este planeta que con más frecuencia mata a miembros de su propia especie y la única que lo hace en el nombre de dios. Pertenecemos a una especie que ha causado la extinción de otras muchas especies y que ahora corre el riesgo de extinguirse. Esta es la parte oscura de la conciencia humana y no podemos negarla. Pero a la vez, la otra parte más luminosa, nos dice que somos una especie que se pregunta ¿de dónde vengo? ¿qué me ocurre cuando muero? ¿tengo alma en mi interior? Ningún otro animal se hace estas preguntas. Este es un momento muy importante en el que podemos preguntarnos cuál es el siguiente salto de la evolución.
Uno de los grandes científicos del último siglo, el Dr. Salk, descubridor de la vacuna de la poliomelitis, al final de su vida habló de la siguiente fase de la evolución humana, la denominó la fase de la evolución metabiológica: la evolución que está más allá de la biología, es la evolución de la conciencia.
Somos la única especie que es consciente de que es consciente. Podemos preguntarnos cuál es la naturaleza de ser conscientes. El doctor Salk dijo también que en la siguiente etapa de evolución se daría la supervivencia de los más sabios, no de los más aptos. La sabiduría se convertiría en el nuevo criterio de evolución. La supervivencia del más apto está siendo una etapa muy peligrosa de nuestra evolución.
¿Cómo podemos superar la dualidad que nos habita?
Sólo explorándonos a nosotros mismos, a través de la práctica de la meditación, un entendimiento intelectual, a través del amor y de la compasión.

Disipar la oscuridad

Yo sabía mucho de medicina y casi nada de sanar

Por Deepak Chopra
Qué hermoso es todo aquí arriba, sentado en el avión y observando las nubes. O ¿tal vez debería decir que todavía es hermoso? En el atmósfera se hallan peligros invisibles. El aliento tóxico de la industria, los desechos descuidados de la Buena Vida que se lleva allí abajo. Estas capas infinitas de olas blancas me resultan tan puras que por un momento puedo olvidar todo eso.
Hace treinta y cinco años, en mi largo viaje migratorio entre la India y América, yo no estaba preocupado por las nubes. De hecho, no estaba preocupado por nada. Aquel viaje era pura emoción y confianza. Tenía a mi lado a mi joven esposa, recién casados, y la promesa de un buen trabajo. Todos los jóvenes emprendedores que yo conocía en Delhi estaban mirando hacia Occidente, y cuando llegó la noticia de que la guerra de Vietnam había ocasionado una escasez de médicos en los EE.UU., yo no podía esperar para dar el salto. Esperaba que la Buena Vida viniese en mi camino, y lo hizo. Esperaba que la Buena Vida me hiciese feliz, pero no lo hizo.
Invertí casi veinte años de esfuerzo para demostrarme ambas cosas a mi mismo. Esa noche, acampado en un motel raído de Nueva Jersey, encendí la televisión en color por primera vez en mi vida y vi como llevaban al hospital una víctima sangrienta de la violencia callejera. Dios mío, le estaban llevando al hospital donde yo estaría trabajando al día siguiente. En algún sentido estos pocos ingredientes – los pacientes necesitados, la televisión en color, y correr de un hospital al otro – se convirtieron en sellos de mi nueva existencia.
En el año  1980 me encontraba a la deriva, viéndome como una persona que sabe casi todo de medicina pero casi nada de sanar. Después de estar una temporada dando tumbos, hice algo que ninguno de mis amigos indios estaban haciendo: volví a dirigir mi mirada hacia Oriente. No solo por mis inquietudes personales. No solo para encontrar a Dios, de hecho esta no era mi intención. No dejaba de pensar en una cosa: ¿porqué la búsqueda de felicidad nos hace tan infelices? Me había dedicado a encontrar la felicidad, y ahora una figura inminente y alarmante se interponía en mi camino.
Esta figura era el gurú. Los occidentales convierten a sus gurus en unas superestrellas espirituales o en unos charlatanes mezquinos. Pero en la India, un gurú es más como tu consciencia. Hablando en términos estrictos, la palabra sanskrita guru significa el que disipa la oscuridad, pero en la vida cotidiana los gurus son como una voz interna molesta que te recuerda que hay cosas más elevadas por las que puedes vivir. No hace falta decir que los gurus no encajan con la Buena Vida.
En la India somos culpables de utilizar los gurus espirituales de forma anodina, inofensivos como un vicario inglés pero igualmente buenos para el alma. Yo decidí tomarlos en serio, porque durante siglos los gurus han pintado una imagen clara: existen dos formas de vivir – una es la búsqueda de placer, y la otra es la búsqueda de moksha, la liberación. Los dos caminos divergen nítidamente, por eso la Buena Vida y los gurus no son compatibles. Yo me había demostrado a mi mismo que el placer lleva al agotamiento y al deterioro interior. ¿Qué alternativa me podía ofrecer el gurú?
No voy a recapitular mis años con Maharishi Mahesh Yogi, excepto para decir que el impacto de un gurú fue todo lo que yo esperaba y más. Encontré mi disciplina interior y el silencio, no solo como fines sino como aperturas a un reino sutil grandioso y desconocido que transciende la naturaleza. Después, llegué a confiar en otra cara del gurú, conocida como upaguru, el maestro que está cerca de ti. Upaguru puede ser cualquier persona o cualquier cosa; cualquier experiencia que trae un destello de entendimiento, un pequeño paso hacia la liberación. Sentado en una habitación solitaria en un hotel en Paraguay o Dubai, he ido a encender el televisor ociosamente para encontrarme con una imagen en la pantalla que me llevaba a un estado de epifanía repentina.
Cuando te dedicas a disipar tu propia oscuridad, el gurú es omnipresente. Después de treinta y cinco años en el camino, esta ha sido la lección la más valiosa. Y creo que esta es la lección que la humanidad necesita aprender ahora. ¿Por qué nuestro planeta se encuentra al borde de la catástrofe ecológica? Porque todos quieren la Buena Vida. La quieren en Khartoum tanto como en el centro de Manhattan. Mientras la Buena Vida sea la forma de llegar al placer de los sentidos, la adquisición de coches, casas, aviones, barcos, vacaciones, motos de agua, etc., hay peligro.
Observando las nubes hoy, veo al gurú. El mensaje de las nubes es el mismo que el mensaje de Vasishtha o Ramana Maharshi o cualquier otro verdadero gurú: Redescúbrete y mírate a ti mismo con ojos nuevos. No salvaremos el planeta mientras nos vemos a nosotros mismos con los ojos antiguos. Si los humanos son animales que antojan placer de forma insaciable, estaremos perdidos. Pero la felicidad puede ser definida por el otro camino, la búsqueda de la liberación. Yo nunca seré libre mientras soy un individuo aislado luchando contra la naturaleza. La libertad viene de la rendición, y la primera rendición debe ser a la naturaleza.
La naturaleza es una nube. No tiene fronteras. Es increíblemente pura y bella. Sus invitaciones son impredecibles. Las nubes siempre están allí, pero aparecen y desaparecen, siempre al servicio de la vida. Es posible adoptar tal existencia para nosotros mismos. Los humanos siempre han sido observadores del cielo: nos hemos identificado con lo que se encuentra detrás de las nubes.
Así la elección del gurú sigue tan clara como siempre. Yo no creo que nadie vaya a invertir en espacio publicitario para declarar que upaguru es el camino del futuro. Pero las revoluciones brotan inesperadamente (como nubes, una vez más), y creo que la crisis ecológica actual tiene una dimensión profunda. La próxima revolución, la que nos salvará, brotará de nuestro interior. Cuando esto ocurra, la humanidad se experimentará a si misma de un modo nuevo, y cuando las próximas generaciones echen la mirada a las nubes, todavía bellas y puras, dirán en voz baja, “Ah, es cierto. Yo soy esto.”


Una nueva humanidad

Metamorfosis

Por Deepak Chopra

La transformación puede a veces ser dramática. No hay mejor ejemplo en la naturaleza para reflejar esto que la metamorfosis. Basta mirar la transformación de una oruga en una mariposa -una transformación increíble en funcionalidad, apariencia, organización de los componentes, y finalidad – pues transforma un gusano de aspecto asqueroso, voraz, inestable y que repta en una criatura delicada, graciosa y voladora.
Los biólogos nos dicen que en el interior del tejido de una oruga hay unas células llamadas células imaginativas. Resuenan en una frecuencia distinta. También son tan distintas a las otras células de las orugas, que el sistema inmunitario del gusano piensa que son enemigos e intenta destruirlas. Pero las nuevas células imaginativas siguen apareciendo, y cada vez son más. De repente, el sistema inmunitario de la oruga no puede destruirlas lo suficientemente rápido y se vuelven más fuertes, se conectan entre ellas, hasta que forman una masa crítica que reconoce su misión de llevar a cabo el increíble nacimiento de una mariposa.
En 1969 Margaret Mead dijo: Nunca dudes que un pequeño grupo de ciudadanos considerados y entregados pueden cambiar el mundo. Ciertamente, es lo único que lo ha logrado. Creo firmemente, junto con muchos otros, que hay una efervescencia evolutiva dentro de los tejidos de la sociedad establecida de hoy día. A pesar del clamor del miedo que prevalece, la avaricia, el consumo desbordado y la violencia expresada a través de los tejidos de la sociedad, hay una unión de las células imaginativas que están revelando un mundo distinto, una transformación, una metamorfosis.
El poeta uruguayo, Mario Benedetti, escribió: ¿Qué pasaría si un día cuando nos despertásemos nos diéramos cuenta que somos mayoría? Yo digo que las células imaginativas dominarían y harían una emerger la mariposa de un mundo de apariencia de gusano.
Esta es la hora del despertar. Grupos de células imaginativas se están agrupando en todos los lugares; están empezando a reconocerse unas a otras; están desarrollando las herramientas de organización para mejorar la conexión, para que la próxima etapa de nuestra sociedad humana se manifieste, para lograr una nueva sociedad que se compararía con la actual como una mariposa a una oruga. Una nueva dimensión de la vida, una sociedad más compasiva y justa, una humanidad con raíces de felicidad y comprensión mutua. Sois células imaginativas; conectaos con las otras, agrupaos, congregaos, y entre todos construyamos una Alianza para una Nueva Humanidad.
Más información:

10 pasos para una vida consciente

Por Deepak Chopra

1. Escucha la sabiduría de tu cuerpo, que se expresa por señales de comodidad e incomodidad. Cuando elijas cierta conducta, pregunta a tu cuerpo que siente al respecto. Si tu cuerpo envía una señal de inquietud física o emocional, ten cuidado. Si tu cuerpo envía una señal de comodidad y anhelo, procede.
2. Vive en el presente, que es el único momento que tienes. Mantén tu atención en lo que existe aquí y ahora; busca la plenitud en todo momento. Acepta lo que viene a ti total y completamente para que puedas apreciarlo y aprender de ello; luego déjalo pasar. El presente es como debe ser. Refleja infinitas leyes de la Naturaleza que te han traído hasta este pensamiento exacto, esta reacción física precisa. Este momento es como es porque el Universo es como es. No luches contra el infinito esquema de las cosas; por el contrario, sé uno con él.
3. Dedica tiempo al silencio, a meditar, a acallar el diálogo interior. En momentos de silencio, cobra conciencia de que estás recontactándote con tu fuente de conciencia pura. Presta atención a tu vida interior para que puedas guiarte por tu intuición, antes que por interpretaciones impuestas desde fuera sobre lo que conviene o no te conviene.
4. Renuncia a tu necesidad de aprobación externa. Sólo tú eres el juez de tu valer; tu meta es descubrir el infinito valor de ti mismo, sin dar importancia a lo que piensen los demás. Al comprender esto se logra una gran libertad.
5. Cuando te descubras reaccionando con enojo u oposición ante cualquier persona o circunstancia, recuerda que sólo estás luchando contigo mismo. Presentar resistencia es la reacción de las defensas creadas por viejos sufrimientos. Cuando renuncies a ese enojo te curarás y cooperarás con el flujo del universo.
6. Recuerda que el mundo de allí fuera refleja tu realidad de aquí dentro. Las personas ante las cuales tu reacción es más fuerte, sea de amor u odio, son proyecciones de tu mundo interior . Lo que más odias es lo que más niegas en ti mismo. Lo que más amas es lo que más deseas dentro de ti. Usa el espejo de las relaciones para guiar tu evolución. El objetivo es un total conocimiento de uno mismo. Cuando lo consigas, lo que más desees estará automáticamente allí; lo que más te disgusta desaparecerá.
7. Libérate de la carga de los juicios. Al juzgar impones el bien y el mal a situaciones que simplemente son. Todo se puede entender y perdonar, pero cuando juzgas te apartas de la comprensión y anulas el proceso de aprender a amar. Al juzgar a otros reflejas tu falta de autoaceptación. Recuerda que cada persona a la que perdones aumenta tu amor a ti mismo.
8. No contamines tu cuerpo con toxinas, ya sea por la comida, la bebida o por emociones tóxicas. Tu cuerpo no es sólo un sistema de mantenimiento de la vida. Es el vehículo que te llevará en el viaje de tu evolución. La salud de cada célula contribuye directamente a tu estado de bienestar, porque cada célula es un punto de conciencia dentro del campo de la conciencia que eres tú.
9. Reemplaza la conducta que motiva el miedo por la conducta que motiva el amor. El miedo es un producto de la memoria, que mora en el pasado. Al recordar lo que nos hizo sufrir antes, dedicamos nuestras energías a asegurarnos de que el antiguo sufrimiento no se repita. Pero tratar de imponer el pasado al presente jamás acabará con la amenaza del sufrimiento. Eso sólo ocurre cuando encuentras la seguridad de tu propio ser, que es amor. Motivado por la verdad interior, puedes enfrentarte a cualquier amenaza, porque tu fuerza interior es invulnerable al miedo.
10. Comprende que el mundo físico es sólo el espejo de una inteligencia más profunda. La inteligencia es la organizadora invisible de toda la materia y toda la energía; como una parte de esta inteligencia reside en ti, participas del poder organizador del cosmos. Como estás inseparablemente vinculado con el todo, no puedes permitirte el contaminar el aire y el agua del planeta. Pero en un plano más profundo, no puedes permitirte el vivir con una mente tóxica, porque cada pensamiento crea una impresión en el campo total de la inteligencia. Vivir en equilibrio y pureza es el más elevado bien para ti y para la Tierra.



LA PAZ ES EL PERFUME DE DIOS.
ARMANDO RODRIGUEZ MORALES.