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Cuanto más limpio está nuestro cuerpo de toxinas (de todo tipo) más clara está nuestra mente, y más despierta nuestra consciencia. Cuanto más despierta está, más atenta, más coherente y más potente se vuelve. Mayor es la capacidad de conectar con nuestra fuente interna de sabiduría y creación. Mayor también es el poder de magnetización que alcanza nuestro sistema energético-de-conciencia para influir en nuestro entorno, y ayudar en este proceso de transformación, ascensión e iluminación de la sombra.
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En este importante momento histórico de la humanidad, la Conciencia es la herramienta principal de transformación de nuestra situación planetaria. Ello conlleva que la Conciencia se ha de potenciar desde todos sus ángulos. Desde el conocimiento, desde la alimentación, desde la depuración, desde los suplementos dietéticos, desde el conocimiento sobre aquellos factores que limitan y restringen su expansión, desde la meditación y toda práctica de alineación, desde el propio despertar de conciencia, desde un trabajo psicológico y de trabajo personal, etc.
La depuración corporal no sólo conlleva el realizar varios procedimientos de limpieza de toxinas, sino también un cambio, gradual, de la manera de comer. En el comer también existe una depuración, porque cuanto más sano comemos más ayudamos a mantener limpio nuestro cuerpo internamente. Así que la depuración no sólo consiste en ayunos, procedimientos de limpieza, etc., sino también, el ser consciente de qué es lo que ingerimos, ya que no tiene sentido comer alimentos tóxicos para luego desintoxicarse, es un contrasentido.
También es importante mencionar que el proceso de desintoxicación, de limpieza, de cambio de hábitos de alimentación es un proceso, y como tal, depende de nuestra conciencia. A medida que despertamos, más sentiremos la necesidad de respetar nuestro cuerpo, ya que es el templo de nuestra Alma, y vehículo de su expresión. A medida que nos hacemos conscientes y realizamos en nosotros tal realidad, sentimos como nuestra intuición, nuestro sentir interno nos va guiando hacia aquello que más nos conviene. Por lo tanto, el desarrollo de la escucha interna, de la atención a los signos y señales de nuestro cuerpo se vuelve un punto clave en este proceso de auto-transformación.
Como decía al principio, cuanto más limpio está tu cuerpo, más clara estará tu mente.Limpia tu cuerpo, cuídalo para ayudar a que tu conciencia recupere su potencial de creación y transformación que tan necesario es hoy en día. Hazte responsable de ti mismo para co-crear una nueva realidad de mayor Conciencia en este Planeta.
Desde mi punto de vista, hemos de llegar a sentir nuestro cuerpo como un Templo Sagrado en el que llegamos a realizar una verdadera transformación o alquimia de nuestra conciencia. Nuestro cuerpo se vuelve sagrado a medida que despertamos, y como consecuencia cada vez lo cuidamos más, más atención le prestamos, más lo escuchamos, más lo queremos, menos le intoxicamos, menos ingerimos alimentos o bebidas o le sometemos a situaciones y contextos que sabemos que lo perjudican, por tanto más le damos lo que necesita para que nuestra conciencia pueda expresarse a través de él en todo su potencial (o hasta el que lleguemos, dadas nuestras limitaciones humanas), ayudando así a la Humanidad entera, ya que nuestras conciencias están unidas a través de un "campo de conciencia" o "inconsciente colectivo" del cual bebemos y formamos parte.
Pero la depuración no queda en el comer y el limpiar, sino que la depuración tiene que ser una depuración integral. ¿Qué entiendo por una depuración integral? Pues en la línea del párrafo anterior, eliminar para depurar todo aquello que interfiere con el óptimo funcionamiento de nuestro "instrumento" (nuestro cuerpo) para la expresión de nuestra conciencia. Hay que incrementar el potencial humano desde todos los ángulos. En otras palabras: un revisión progresiva y a medida que esa "voz interior" nos va pidiendo unalimpieza física (del cuerpo y del entorno), mental (pensamientos parásitos e influencias perniciosas), emocional (emociones destructivas, trabajo psicológico), social (relaciones no enriquecedoras o destructivas) y espiritual (creencias que nos limitan). Esto conlleva la depuración o limpieza de lo siguiente:
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| | Depuración Integral | |
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A nivel físico:
Del cuerpo:
Mejora de los hábitos de alimentación; comer de forma más saludable (¡alcalinizar el cuerpo no acidificarlo!). Con bebidas depurativas a base de vegetales. Comer la menor cantidad posible de productos de origen animal. Comer preferiblemente productos de cultivos ecológicos, que aseguran la no utilización de pesticidas, hormonas o productos alterados genéticamente.
Eliminar productos con azucares refinados, con edulcorantes, productos ricos en glutamatos (como el Ketchup) pues son neurotóxicos.
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Ejercicio físico.
Practicar yoga, o Taichí, o chi Kung.
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Beber suficiente agua (sin flúor) para hidratar el cuerpo y limpiar los riñones. Lo ideal es beber agua solarizada se prepara en una botella de azul de cristal sin etiquetas se deja al sol mínimo una hora. (esto potencia el sistema inmune.
Dejar de beber CocaCola y bebidas afines (Sodas), son tóxicas y acidifican.
Eliminar todos los productos (agua de grifo y botellas, pasta de dientes, colutorios, etc.) que contengan FLÚOR.
Tomar el Sol 10 minutos diarios preferiblemente por la espalda y cubriendose la cabeza. antes del medio día o en la tarde.
Del entorno:
Ionizar el ambiente con iones negativos (por ejemplo, con lámparas de sal, o con ionizadores varios que se ofertan en el mercado).
Los móviles, redes inalámbricas de Internet y demás aparatos que generen ondas microondas, seguir los consejos en el apartado radiación sobre el uso del móvil. En resumen, intentar tener el móvil lo más lejos posible del cuerpo e intentar hablar siempre a través de auricular. Apagar y retirar la batería del móvil cuando os vayáis a dormir. Desconectar todos los aparatos eléctricos de la habitación a la hora de irse a dormir.
Colocar al lado del ordenador un cactus del tipo san pedrito. Utilizar placas protectoras de radiación para el móvil y el ordenador.
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Armonizar el ambiente siguiendo las principios del feng- shui.
A nivel mental:
Eliminación de la televisión, por ser la fuente principal de influencia mental y de modificación cerebral (el cerebro y las neuronas son plásticas, y la tv nos induce a un estado mental de aletargamiento como consecuencia de la actividad generada en el cerebro).
Eliminación de fuentes de información que contengan violencia, e información basura. Seleccionar la información que vemos, oímos, escuchamos, leemos.
Eliminación a través del auto-cuestionamiento, de ideas, prejuicios, creencias, expectativas, deseos, etc., que limitan nuestra mente, que la distraen, y que no le permiten pensar con claridad. Pero para saber cuáles son es preciso auto-observarse y "despertar".
Eliminación de las ideas, creencias, supuestos y convenciones de la realidad política, económica, histórica, social, científica, médica, religiosa, planetaria, y galáctica que damos por sentados como verdaderos y reales. La Verdad dista tan lejos de lo que sabemos y hemos creado en nuestras mentes limitadas que ni la imaginación puede llegar a adivinar de qué se trata... www.projectcamelot.org
Eliminación de aquellas actividades e intereses que adormecen nuestra mente, que la sumen en un estado de stand by, aletargamiento, adormecimiento, bloqueo, que hacen que nos pase el tiempo sin ser aprovechado.
Es recomendable practicar cualquier tipo de meditación diariamente, o lo más frecuente posible para sincronizar las ondas cerebrales de ambos hemisferios, y para entrar en el propio mundo interno... la meditación aporta una base de serenidad y distanciamiento de uno mismo para poder observar qué ocurre dentro y fuera de nosotros. Ayuda a trabajar el silenciar el ruido interno.
Un trabajo interior, personal y psicológico de armonización. Un trabajo con la sombra psicológica. Limpiar nuestra sombra iluminándola, haciéndola consciente para que deje de tener el control sobre nuestra consciencia, nuestra conducta, nuestras reacciones.
Eliminación de las programaciones emocionales que nos mantienen atados en el pasado, que nos mantienen reactivos.
Un trabajo de desapego tanto de lo físico, mental, emocional y social. El apego nos mantiene atados, rígidos, reteniendo el fluir de la energía. El trabajar el desapego nos ayuda a fluir mucho mejor con el curso de la vida y los acontecimientos. Trabajar el desapego es volverse flexible ante los cambios, es dejar ir, soltar, dejar que las cosas ocurran... y utilizar la experiencia como fuente de aprendizaje y auto-conocimiento.
Eliminación de las relaciones perjudiciales (si uno puede, ya que a veces las necesitamos porque suplen nuestras carencias afectivas).
Eliminación de los ambientes, lugares, círculos, entornos sociales que limitan la expansión de nuestra conciencia, que nos influencian negativamente. (Una vez más, a medida que dejemos de necesitar estos lugares, dejaremos de ir ellos, pero no está de más hacerse consciente de que ciertos lugares reducen nuestra energía energética y posteriormente física, mental y emocional).
Pasar el menor tiempo posible en las grandes superficies comerciales pues son ambientes ricos radicación, generadores de ruido interno .
Eliminación por auto-cuestionamiento de las creencias que no están basadas en evidencia, en un saber. Es importante pasar de la fe en algo, al saber de algo. La fe es pueril, infantil (sin ofender), aunque la necesitemos a medida que basamos nuestra espiritualidad en una experiencia real interna que nos aporta un saber, una sabiduría, un conocer por propio contacto con la Verdad. Cultivar un espíritu crítico tanto de lo conocido como por lo conocer. Y no dejar de preguntar ¿y por qué es cierto, y por qué es así, y por qué se da por sentado, y por qué tengo que aceptarlo?, ¿y por qué esto, y por qué lo otro?, ¿y por qué no puede ser de otra manera?. Hay que recuperar el niño interior que aprender, busca y se pregunta.
Eliminación por auto-cuestionamiento de todas las modas espirituales, léase, New Age, seamos consciente de que la espiritualidad no consiste en experimentar, sino en transformarse para convertirse en un ser sirviente y catalizador de transformación allí donde esté. La espiritualidad tiene que surgir de dentro como algo genuino, si viene de fuera, nunca será genuino, aunque lo de fuera ayude a lo de dentro a serlo.
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