Las 63 puertas de los Amadores. Conciencia-Emoción-Pensamiento

LAS 63 PUERTAS DE LOS AMADORES.. CONSCIENCIA-EMOCIÓN-PENSAMIENTO...

El Maestro se deslizaba sobre sus pies, sin la cadencia habitual que los humanos tenemos al caminar. Daba la genuina impresión, de levitar sin mover sus pies. La serenidad de su rostro, parecía mostrar que sus pensamientos se hallaban estimulados en dimensiones de exquisita fragancia. Venía del templo principal, de su rutina matinal de meditación. Sus labios se movían casi imperceptiblemente, balbuceando uno de sus mantram favoritos. El sol se asomaba sobre el horizonte tiñendo los muros blancos, de un suave rosado. La primavera engalanaba las alturas en las copas de los árboles, con el despliegue acostumbrado de blancos almendros, ciruelos y damascos. Las aves revoloteaban de rama en rama, y las veredas bordeadas de blancos lirios silvestres, enmarcaban el paso de los discípulos del ashram, que esperaban por sus guías espirituales que a modo de sol personal, iluminarían las almas en el silencio enamorado de la Luz, de la Madre eterna. Cuando el Maestro se introdujo en la atmosfera deslumbrante de los discípulos, un aire mágico revoloteó entre ellos como si pájaros invisibles dieran la bienvenida marcando el inicio de los consejos del día. Inclinaron la cabeza en señal de respeto, envueltos por la energía de las flores, que parecían contribuir a la escena con sus cálidos efluvios aromáticos. La costumbre decía que un discípulo haría la primera pregunta, con la cual el Maestro comenzaría su inspiración, entregando las enseñanzas.
Discípulo: ¿Maestro, cuáles son las sugerencias que debiéramos entregar, a aquellos que viven fuera del ashram, en las comunidades, en los pueblos, en las ciudades, por donde iremos a entregar las enseñanzas? Después de un silencio habitual, el Maestro miró a todos y cada uno de los discípulos, como dirigiendo las enseñanza a cada uno en particular y dijo:

(1) El pensamiento te atrapa, te atrae porque ésa es su función respecto del concientizar de la vida, para la vida.
(2) Para vivir tienes que permanecer en constante fluctuación entre la contemplación, las evocaciones alegres, gratificantes y místicas pasando de una a otra para que el día sea productivo.
(3) Usa los mecanismos mentales de evocación para rescatar toda emoción que se relacione con la ternura, la alegría y la paz ya sean cielos, olores, colores, personas buenas, momentos de alegría, reuniones o sonidos de armonía paz, alegría, ternura e inofensividad.
(4) No critiques ni armes juicios a otras personas. Ellos tienen sus propios conflictos que resolver y tú con los tuyos, tienes más que suficiente.
(5) No te ocupes de otras personas sólo por saber, por curiosidad, por controlar la situación, por desconfianza, por dominar la situación, por lograr lo que tu egocentrismo te propone y exige a los demás.
(6) Sé neutral en tus observaciones. No sigas el pensamiento descontrolado que todo lo quiere saber o piensa que todo lo sabe. Seamos prudentes, no invasivos.
(7) Busca tu propia libertad interior, ya que en lo social, la libertad está restringida por los límites de los demás.
(8) Cada quien tiene el derecho de elegir su camino y su compañía. No te interpongas en la libertad de los demás aunque estos sean tus hijos.
(9) Respeta las decisiones de los demás. No seas un intruso en la vida de otros. Cada quien tiene derecho de elegir su espacio íntimo, de la misma forma que lo haces tú.
(10) Muchas veces, es más importante lo que debes dejar de hacer, que lo que crees que debes hacer para resolver algunos conflictos.
(11) Aprender, aprender a escuchar es algo que muchos de los que te rodean están necesitando que aprendas. Un buen oyente, es alguien que ha aprendido a respetar a los demás.
(12) Todos necesitamos ser considerados. Necesitamos que nos entiendan y que tomen en cuenta nuestras ideas y opiniones. No es suficiente con que nos escuchen.
(13) Cuando alguien, no respete ninguno de las sugerencias anteriores, no te desanimes. Alguien tiene que hacerlo. Quizás seas tú.
(14) Si en algunos momentos, te cansas de aprender, sin que los demás aprendan ni quieran hacerlo, “descansa”. El estrés, distorsiona la realidad y hace perder la paciencia. Para seguir entendiendo a los demás, hay que descansar de vez en cuando. Quédate contemplando la lluvia, escuchando los pájaros, el silencio, mira las hojas de los árboles o mira a un niño jugando. Sólo mira, no pienses.
(15) Conociendo el funcionamiento de la mente puedes hacer uso de sus mecanismos en una dirección diferente a la que ella te propone. Generalmente, se dirige en un sentido auto centrado. Lo aprendido, no siempre es lo mejor para la mayoría.
(16) Haz que las emociones, tus emociones, sean gratas en tu corazón y despierten en ti sentimientos de paz y alegría. Ser un alma que deambula por la vida haciendo de la consciencia un medio para la evolución personal, en beneficio de los que te rodean, y para beneficio propio, es la forma de cumplir con las leyes de la vida (O las de Dios).
(17) Cuando tus emociones busquen recuerdos ingratos, o te sugieran desconfianza de aquellos que te quieren, no lo permitas. Las emociones activan la selección de pensamientos que son afines, asociados, a las emociones del momento. El psiquismo buscará en tus pensamientos y recuerdos, todo aquello que tenga relación con tus emociones. La ceguera que provocará la emoción, te alejará de la realidad de lo que esté sucediendo en el momento. Hasta es posible, que no puedas darte cuenta de lo que digas o hagas.
(18) Cuando las emociones distorsionan radicalmente tu percepción de la realidad, existe la posibilidad, de que te des cuenta después, en el futuro inmediato y hasta te arrepientas. Pero también puede suceder, que guardes en tu recuerdo, la percepción equivocada de lo que sucede, como una realidad totalmente personal, una realidad indisoluble que defenderás por siempre y que los demás no compartirán contigo por ser una percepción equivocada de tus emociones.
(19) ¿Cuántas situaciones de conflicto, son básicamente formadas, en medio de una percepción distorsionada por fuertes emociones?.
(20) El aprendizaje del funcionamiento de las emociones, es un aprendizaje decisivo en la vida. Nadie parece incluir la pedagogía de las buenas emociones en el crecimiento de los niños. Nadie parece desear aprender a evitar las emociones que perjudican las relaciones entre los que se quieren.
(21) Las emociones son, las que le dan sentido a las cosas y las situaciones. Son también, las que le dan un “valor” a las cosas, las personas y las situaciones.
(22) La asociación de un estado emocional, a un valor dado a una persona o cosa, provocará reacciones y conductas entre los humanos.
(23) Si la asociación aprendida, asociada entre objetos, personas y situaciones, tiene connotación amenazante, o rechazante, las reacciones y conductas humanas serán defensivas o evasivas.
(24) El grado de defensa variará de acuerdo a la situación, el valor de los objetos o costumbres, y la impulsividad de cada persona.
(25) Es conveniente reeducar las emociones, cambiando el valor de las cosas, y de las costumbres aprendidas de la tradición. Muchas de las desaveencias, tiene su base en lo aprendido.
(26) Los padres, frecuentemente agreden legalmente a sus hijos, tanto física como emocionalmente, simplemente porque tienen miedo, de que en determinadas situaciones, corran algún peligro; los hagan quedar mal ante la sociedad o no cumplan con lo establecido por las costumbres.
(27) Los hijos, se distancian de los padres por considerar a estos, irracionales, exagerados, incongruentes, desatinados y hasta ofensivos. Por otro lado, los padres sólo ven en ellos, desobediencia, irrespetuosidad e inmadurez. Todas estas situaciones, representan distintos grados emocionales que hace a cada uno, percibir una misma situación, como una realidad distinta.
(28) Las parejas, olvidan que son seres humanos distintos, educados de formas distintas, con experiencias y necesidades diferentes y lo que es más severo, con aprendizajes de valoraciones diferentes. Las parejas se unen por fuertes emociones provocadas por la educación estética y por un impulso natural y biológico.
(29) Estas emociones son verdaderamente gratificante. Todo es considerado maravillosamente bueno para cada integrante. La ceguera emocional quiere ver toda la personalidad del otro, como conveniente y complementaria entre ambos.
(30) Las costumbres, se dejan de lado en un mundo moderno, donde las personas se reúnen casi sin discriminación, en escuelas, universidades y lugares comunes de reunión. los jóvenes, se miran a través de un lente en el cual, las diferencias no son tantas ni tan amplias.
(31) Estas diferencias, se descubrirán una vez pasado el universo de las emociones placenteras. Ayudarán los años, que tras cada instante de madurez, los humanos vemos con mayor amplitud y profundidad en los detalles. Generalmente, el desarrollo humano, produce nuevas y más complejas necesidades así como numerosas nuevas percepciones.
(32) Cuando nos relacionamos con nuestros iguales a los quince años, notaremos la diferencia si continuamos relacionándonos con la misma persona, a los veinte. Si nos conocemos a los veintidós, cuando lleguemos a los treinta y cinco, descubriremos un nuevo universo de necesidades y ampliaremos las exigencias, lo que mostrará mayores diferencias entre las relaciones duraderas y comprometidas de muchos años.
(33) Las personas, cambiamos constantemente de acuerdo a las experiencias vividas, unos más otros menos. Es entonces que aquello que creímos conocer ampliamente, se convierte en algo o alguien completamente sorprendente y desconocido.
(34) En un sistema donde las emociones no son analizadas ni educadas, las relaciones se deterioran con mayor rapidez. Las tradiciones ajustan los comportamientos y las emociones a ciertos códigos que si se los respeta, todo funciones más o menos bien.
(35) Pero, pero, los humanos tenemos como característica, ser individualmente distintos unos de otros. Entre estas diferencias individuales, algunos somos más impulsivos que otros. Más desobedientes unos de otros. Ligera o fuertemente ambiciosos unos y fuertemente inseguros otros.
(36) Es por eso, que algunos se ajustan satisfactoriamente a las tradiciones, costumbres y leyes sociales y otros no. La variedad de posibilidades y oportunidades que el mundo moderno nos ofrece, nos da la oportunidad también de elegir, cambiar, volver a comenzar o simplemente, no apartarnos de lo preestablecido por la mayoría.
(37) Es frecuente, que los padres en sus deseos de que los hijos sean de una determinada manera, o que no sean de otra, crean que el niño de nueve años, es el mismo ahora que acaba de cumplir doce y luego que es el mismo cuando cumple los dieciocho años. Los ven crecer, pero los siguen tratando como si fuesen los mismos que en años anteriores. Los humanos dejamos de ser lo que somos cada tres o seis años durante el crecimiento y desarrollo y seguiremos cambiando en los años siguientes.
(38) Sería conveniente que los padres, trataran de volver a conocer a sus hijos en cada etapa de crecimiento, ya que van cambiando constantemente. De esta forma, se evitarían muchos conflictos y la autoestima se iría formando ordenadamente.
(39) Lo cierto es, aunque no nos guste, la evolución social se debe principalmente a “la desobediencia”, más que al cumplimiento repetitivo de las costumbres.
(40) Los poderes económicos, los sistemas comerciales, que lideran (o debiéramos decir, dominan) a los humanos en el mundo, imponen cierta cultura selectiva y discriminativa entre las personas. Estas diferencias relacionadas con el tener, adquirir más y mejor o menos y austero, nos otorga cierto valor a las personas, “el estatus”. Este movimiento emocional del valor de las cosas, hace que el individuo ambicione, sufra perdidas, y seleccione a las personas para relacionarse o amarse. Cuanto más valor le demos a un objeto, mayor dolor o ira si lo perdemos o nos lo quitan. No son pocas las veces, que nos invade la tristeza por no ser invitado, por no vestir de una manera, por no poder entrar a un lugar, o por no ser aceptado por un grupo.
(41) Las emociones son, la base de la formación de la auto estima. Otro factor que en la pedagogía del crecimiento humano, no se tiene muy en cuenta. Los logros son tenidos en cuenta y maravillosamente bien evaluados.
(42) El liderazgo es una de las funciones sociales que mayores puntos se le asigna. Las metas son cuantitativamente exaltadas cuando se cumplen paso a paso dentro de tiempos reducidos, en una escalada competitiva sin límites. Bueno, si, hay un límite, ”la falta de salud y la ausencia en las relaciones afectivas familiares”. Dos inmolaciones de los exitosos, que en la edad del adulto mayor, se sienten inclinados a justificar con que, “lo han hecho por el bien de la familia”, y en medio de esto, los hijos olvidamos todo, si se nos da la comodidad y el financiamiento para comenzar a obtener nuestros propios logros. Pero esto no nos quita el vacío de las carencias.
(43) Las emociones, son parte de los afectos. Entre los afectos se halla ese conjunto de factores gratamente emocional, que llamamos Amor. Este es neutro socialmente hablando. Es decir, no tiene relación con los logros ni con el estatus. Es independiente de todo lo aprendido incluyendo las costumbres. Amar es una cualidad humana “consciente”, por eso es solo humana. No nace como un impulso genético. Se debe descubrir, elaborar, aprender, desarrollar lejos de las tradiciones, de las costumbres, de las reglas, de las normas, de los valores, de la supervivencia, de las creencias, de las necesidades, de las limitaciones. El Amor es una cualidad del alma, que la conciencia humana tiene la responsabilidad (Ante Dyos) de traer hacia la vida, hacia las cualidades humanas. Su objetivo es, “La unidad”, “Re-Unir” por sobre los impulsos genéticos de sobrevivir.
(44) Las emociones dijimos, le dan sentido a las cosas. El Amor le da sentido a las emociones.
(45) Las emociones, ayudan a lo biológico a mantener la especie, a sobrevivir entre los más aptos. El amor rescata las emociones y las transforma en Unidad y Re Unidad entre las almas, para coordinarse entre los que se unen, para aprender a seleccionar las mejores emociones, a través de la selección, de los mejores pensamientos.
(46) Cuando el Amor se Une a las emociones, surge entonces la “Devoción”, que es la máxima expresión humana de los afectos. Es por eso, que en algunas culturas antiguas, se hablaba de que los padres eran sus dioses y los esposos se veían como dioses interactuando en la vida a través del Amor En aquellas culturas ya desaparecidas, el Amor se hallaba por sobre las tradiciones, las normas y las reglas. A diferencia de esta humanidad, que impone las reglas, las costumbres o tradiciones, por sobre el Amor.
(47) El sentido de la vida en sí misma es, la evolución de la consciencia. Ser consciente de todas las realidades del vivir y el convivir. Ser consciente, que somos una sola Unidad constituida por millones de individualidades, diferentes unas de otras. Ser consciente de los afectos, de cada instante, de cada detalle del vivir, debiera ser el mayor ejercicio humano. De esta forma, el estrés, no existiría.
(48) Todas las Unidades de la existencia, son constituidas por grupos de individualidades diferentes unas de otras y complementarias entre si. Las diferencias, como una de las leyes de Dios, no fueron establecidas para competir unos contra otros, sino, para complementarnos unos con otros. Porque antes de la vida, la existencia del alma, es Unidad de individualidades. Todo, surge de la Unidad indivisible de la madre Creadora.
(49) La tarea humana es, ser consciente de sí mismo, de los demás, de las realidades, del funcionamiento psíquico, del funcionamiento emocional, del cómo nos podemos complementar, del cómo seleccionar los mejores pensamientos y las mejores emociones.
(50) La salud se va perdiendo a medida que el ser humano, deja de ser consciente de sí mismo y de los detalles que componen cada relación y cada momento.
(51) La re educación de las emociones, nos lleva hacia el conocimiento de aquello que llamamos Amor. La educación de las emociones, tiene como objetivo, re Unir a las personas. Es la tarea humana del tercer milenio.
(52) Como hemos dicho algunas veces, comencemos por valorar a quienes nos rodean. A aquellos, con quienes hemos creado recuerdos durante años. Podemos elegir las emociones, si sabemos elegir los pensamientos y los recuerdos. Al mirar, a aquellos que guardan nuestros mejores momentos. considerémoslos como la oportunidad de generar las mejores emociones en nosotros mismos. No dejemos de valorar aquello que hemos logrado; aquello que tenemos, aunque sea poco, simple y repetido.
(53) No le tengamos miedo a la humildad, que es sinónimo de paz, de empatía y Unidad.
(54) No le tengamos miedo a la inofensividad, que es sinónimo de inocencia y alegría. No le tengamos miedo a los mejores pensamientos, que mantienen la unidad y aleja la soledad.
(55) No le tengamos miedo al olvido de algunas diferencias y equivocaciones del pasado.
(56) No le tengamos miedo a equivocarnos, pues es la forma que el humano tiene de aprender.
(57) No tengamos miedo a cambiar el valor de las cosas, si éstas provocan ansiedades innecesarias.
(58) No tengamos miedo de reconocer los errores, ni de disculparnos. Esta es la forma de evitar las eternas justificaciones y del echarle la culpa a otros de aquello que hemos hecho y no es aceptado por los demás.
(59) No somos perfectos, somos perfectibles ya que aprendemos de los errores. Nadie nace sabiendo y solo la experiencia nos muestra quienes somos y es la experiencia la que nos da la oportunidad de mejorar constantemente.
(60) No tengamos miedo de nosotros mismos, aceptémonos como somos. Amemos nuestros errores porque sin ellos, no podríamos ser consciente de la realidad. La aceptación de nosotros mismos, unida al deseo de mejorar constantemente, evita las culpas que nos mueven a defendernos y agredir a los demás.
(61) En la educación, los niños deben tener la oportunidad de decir “me equivoqué”, sin ser reprendidos por esto. Si los castigamos al decir las primeras verdades, comenzaremos a enseñarles que, “una verdad nunca es aceptada” y recibe alguna forma de castigo. Ésta es la forma, en que aprendemos a mentir. De la misma forma, los educadores deben se capaces de escuchar a sus alumnos o los padres a sus hijos, cuando no entienden las consignas o el contenido de una materia. Esto implica tener la capacidad de volver a explicar desde otra perspectiva, “las veces que sean necesarias” para que el niño aprenda. De lo contrario, si el niño es castigado cuando pregunta más de una vez, lo que no ha comprendido, se reservará el derecho de guardar en silencio su ignorancia, diciendo que ha entendido.
(62) No son pocos los hijos y alumnos, que no aprenden, porque no se les quiere enseñar. Y como si esto no fuese poco, se les deteriora la auto estima con frases como: “Eres tonto. ¡Ya te lo he explicado!”.
(63) Nadie nace sabiendo, ni todos tenemos las mismas capacidades de aprender. Ayudémonos a motivarnos para seguir comunicándonos, para seguir aceptándonos como somos, para confiar entre los que estamos juntos, para regresar al núcleo familiar con el agrado, de reunirnos con quienes supieron hacernos notar, que nos Aman tal como somos.

(Dharmatha Matri Ram)