Comenzare a realizar entregas sobre este interesante tema NUESTRO NIÑO INTERIOR Amorosamente Maria Elena

Comenzare a realizar entregas sobre este interesante tema NUESTRO NIÑO INTERIOR
Amorosamente

Maria Elena

Regreso nuevamente con ustedes luego de ser nuevamente SANA!

¿Qué es el niño interior? ¿Por qué debemos ocuparnos de él? El “Niño Interior” simboliza nuestro ser emocional, esa parte nuestra que creció en un entorno familiar determinado, y que, a muy temprana edad, empezó a ser condicionada a través de la culpa, la crítica, el miedo, el rechazo …. Todos hemos tenido heridas emocionales que si no hemos trabajado en sanarlas, actúan constantemente boicoteando nuestras relaciones, nuestro trabajo, nuestro bienestar. Cuanto más conozcamos ese “niño interior” herido, y aprendamos a acogerlo y a sanarlo, más podremos ser capaces de conseguir que esta parte de nuestra personalidad trabaje a nuestro favor en lugar de perder energía peleándonos con ella. Con la experiencia y la capacidad que ahora tenemos podemos aprender a escucharle, abrazarle, acoger sus sentimientos, educarle y ponerle límites saludables a sus reacciones y comportamientos. En los escritos que les estaré entregando sobre este aspecto de nosotros, aprenderás a reconocer tu “niño interior” mediante un camino de autodescubrimiento. Aprenderás a establecer una comunicación profunda y amorosa con esta parte de tu ser. Aprenderás a cuidarlo y amarlo. Aprenderás a identificar las formas habituales en que se expresa tu “niño interior” herido y pasará a convertirse en un niño interior aceptado, apoyado y amado. Conocerás las claves para detener su auto-sabotaje a tu bienestar vital. Aprenderás a integrarlo en tu vida de adulto. que este niño necesita es AMOR. También necesita ser reconfortado acerca de traumas y dolor de eventos vividos, y que le aseguren que eso no sucederá de nuevo. Necesita expresar sus sentimientos.

¿Qué es el niño interior? ¿Por qué debemos ocuparnos de él?

El “Niño Interior” simboliza nuestro ser emocional, esa parte nuestra que creció en un entorno familiar determinado, y que, a muy temprana edad, empezó a ser condicionada a través de la culpa, la crítica, el miedo, el rechazo …. Todos hemos tenido heridas emocionales que si no hemos trabajado en sanarlas, actúan constantemente boicoteando nuestras relaciones, nuestro trabajo, nuestro bienestar. Cuanto más conozcamos ese “niño interior” herido, y aprendamos a acogerlo y a sanarlo, más podremos ser capaces de conseguir que esta parte de nuestra personalidad trabaje a nuestro favor en lugar de perder energía peleándonos con ella.
Con la experiencia y la capacidad que ahora tenemos podemos aprender a escucharle, abrazarle, acoger sus sentimientos, educarle y ponerle límites saludables a sus reacciones y comportamientos.
En los escritos que les estaré entregando sobre este aspecto de nosotros, aprenderás a reconocer tu “niño interior” mediante un camino de autodescubrimiento. Aprenderás a establecer una comunicación profunda y amorosa con esta parte de tu ser. Aprenderás a cuidarlo y amarlo. Aprenderás a identificar las formas habituales en que se expresa tu “niño interior” herido y pasará a convertirse en un niño interior aceptado, apoyado y amado. Conocerás las claves para detener su auto-sabotaje a tu bienestar vital. Aprenderás a integrarlo en tu vida de adulto.
que este niño necesita es AMOR. También necesita ser reconfortado acerca de traumas y dolor de eventos vividos, y que le aseguren que eso no sucederá de nuevo. Necesita expresar sus sentimientos.

EL ROL DE LA ENERGIA DEL NIÑO 2

 Hablemos de su Niño… Este posee las claves para llegar al origen de todas las interpretaciones erróneas que se han hecho acerca de los males que aquejan a su mundo.

Escuchen entonces... El niño... su niño, es el menos comprendido y atendido de generación en generación... de civilización en civilización... de historia en historia... No estamos haciendo alusión a la forma física de vuestros niños o de cuando ustedes pasaron por esa etapa del desarrollo... Estamos hablando de la energía del niño en ustedes… Esta energía ha sido el origen de muchas de sus frustraciones. Es un tema parcialmente comprendido a lo largo de su tiempo.

Sostengan esta frase por unos momentos…“Su niño es una energía”… Respírenla por favor… y sientan… ¿Se dan cuenta?… Está viva, se mueve, tiene empuje y poder... Es algo que se encuentra alojado en ustedes… Es algo que les sigue y acompaña por donde quiera que vayan… Es algo con lo que pueden crear… así de grandiosa y magnifica es esta energía... Por estar presente, les revitaliza y llena de frescura… Le brinda chispa y dinamismo a su experiencia... alegría y pasión… Es un combustible divino… es algo que no pueden eliminar de su experiencia humana… Sería una especie de suicidio el atentar contra ella, así como también un error el reprimirle, el no escucharle o dejarle sin atención… Las consecuencias podrían ser dolorosas... Ustedes lo han experimentado.

Queridos, la energía de vuestro niño les proporciona potencial para que se muevan, para que ustedes puedan crear y manifestar… Encierra un campo inmenso de posibilidades para que se experimenten como creadores de forma constructiva… sin embargo cuando se olvidan de ella, generan incomprensión, drama y dolor … Al mismo tiempo se ven asaltados por diversos temores y dudas con respecto a su capacidad para seguir adelante, aumentan sus preocupaciones y estrés.... Se sienten atrapados y con un peso que les hunde o ahoga.

Sus miedos no se resuelven evitando las causas de su malestar, sino generando la comprensión del origen de las mismas... Ustedes por ejemplo, temen quedarse sin trabajo, ya que piensan que nadie se hará cargo de su persona amorosamente en lo que se pueden reubicar… Están convencidos de que todo se lo deben de ganar y luchar por ello... les han repetido infinidad de veces que nada es gratis, que todo cuesta y siempre se oculta un interés.. Hay que hacer meritos, han sido condicionados para trabajar duro y desconfiar, para luchar sin descanso y competir, para ganar a toda costa y eliminar lo que se oponga... Por ello deben controlar todo, cuidar sus pertenencias de otros, amurallarse y evitar que alguien trate de abusar de ustedes... Aunque pudieran tener lo suficiente para vivir bien, mantienen actitudes de carencia motivadas por el temor a perder.

En el fondo de esta situación, se sienten solos, aunque esten rodeados de personas que les traten bien... No pueden confiar en nadie realmente, ni en la vida, ni en ese ser al que llaman dios... Les paraliza el temor a ser traicionados, defraudados o abandonados... En la práctica su mejor amigo es una moneda en la bolsa, es el que no falla y les saca de todo apuro... hay que ser prácticos se dicen... pero al mismo tiempo algo les sigue desgarrando por dentro... ya no saben qué hacer... Si tienen todo... de todos modos viven con miedo... si les faltan cosas... también viven con miedo... Uno de sus mayores traumas es el sentirse desatendidos y abandonados... El creer que alguien les volteo la espalda cuando confiaban plenamente... en algún momento de su vida se clavo ese dardo venenoso en su ser... Esta experiencia les golpeo fuertemente... ¿Y Por qué? ... Su niño de nueva cuenta tiene la respuesta… él les dice... No puedes confiar en la gente mayor, debes encerrarte, aguantar y mentir para que no se den cuenta de lo que realmente sientes... No puedes confiar en dios... No puedes confiar en la vida... Todos ellos, alguna vez te han defraudado, te maltrataron, no tomaron en cuenta tu sentir, fueron duros, te abandonaron.

Entonces queridos míos... No se avergüencen por sentir miedo, tan solo traten de seguir escuchando la voz de su niño y descubran las razones por las que se sienten abandonados o maltratados... desatendidos o abusados... desvalorizados o no tomados en cuenta… Si lo hacen de esta forma, la voz de su ángel acudirá para brindarle comprensión a sus lágrimas… Su alma podrá entonces descansar… ella podrá ver y comprender el motivo de su dolor... descubrirá al mismo tiempo que estaba rodeada por mas niños con mascaras de adulto, pero tan traumatizados como ella… entenderá el error de su interpretación… Dejaran entonces de luchar contra ustedes mismos y los demás… Comprenderán que no son victimas… Sentirán la paz que solo puede brindar el Espíritu... y volverán a creer en el Amor, confiaran en ustedes y esto les liberara.

Quedo afectuosa y fraternalmente de todos ustedes...
@ Ari Shemoth

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Amorosamente
Maria Elena

EL NIÑO INTERIOR 3

Tenemos que aprender a cambiar el trabajo por el juego, ya que cuando trabajamos, muchas veces nos forzamos. Forzarse en cualquier situación implica sufrir, y por lo general uno termina bloqueando el camino de la abundancia. Si confiamos en los Ángeles y permitimos que la mayor parte de nuestro trabajo se lleve a cabo en el reino invisible del cielo, obtendremos más que lo necesario. La disposición a liberar la lucha hará que seamos más creativos en todo lo que emprendamos. Los Ángeles nos ayudan a atraer a nuestra vida situaciones que nos permiten ser mejores personas.
Recibimos alegría directamente de los Ángeles. Si nos sentimos alegres, sentimos a los Ángeles. No hay separación alguna. La alegría y el regocijo son invenciones angélicas que apuntan a darnos a los seres humanos un respiro de lo mundano. La alegría y el regocijo son como la felicidad verdadera; no podemos pagar para obtenerlos ni dedicarnos a buscarlos. Sólo podemos hacernos más receptivos para recibir los dones de la alegría y el regocijo, manteniendo la mente abierta y flexible; en otras palabras, actuando con espontaneidad, como los niños.
La vida es un proceso por el que tomamos conciencia de quiénes somos realmente, y los Ángeles nos conocen bien. Ellos nos tienen en una proyección del Yo Superior y de nuestras mejores intenciones / dones en la vida. Ellos quieren conectarnos con nuestro origen divino, y quieren danzar y jugar con nuestra conciencia, para aliviarnos el peso y hacernos felices. Cuando encontremos el juego de nuestra vida con la ayuda de los Ángeles seremos felices sin motivo, aquí y ahora. A su vez, esto atraerá hacia nosotros toda clase de acontecimientos alegres, regocijantes y maravillosos.
Resulta más fácil cambiar el concepto de trabajo cuando volvemos a introducirnos hacia nuestro propio niño. El niño interior es el Yo Superior, nuestra propia esencia pura y no adulterada. El espíritu humano es infantil y alegre. Pero es también muy vulnerable. Necesita protección bajo la forma de amor para crecer y fortalecerse de manera positiva. Muchos espíritus humanos fueron quebrados y reprimidos durante la infancia y la adolescencia. Quizás necesitemos ir hacia nuestro interior y hacer renacer al niño que llevamos dentro para poder reintegrar la alegría y el amor al espíritu humano.
Vamos a visualizar un niño feliz. Lo primero que se me ocurre es alegría, una de las invenciones angélicas específicamente pensada para los seres humanos. Los niños transmiten la alegría con facilidad – sin esfuerzo – por el solo hecho de ser ellos mismos en ese momento. En una época fuimos transmisores de alegría pura, lo que significa que estábamos plenamente integrados con los Ángeles.
Podemos integrarnos plenamente con ellos una vez más si permitimos que la alegría fluya con libertad en nuestra vida. Esto vuelve a llevarnos hacia el “juego”, el juego divino de la creación. Jugar es el acto fundamental para vivir el momento. Olvidemos el trabajo; borremos esa palabra del vocabulario y reemplacémosla por juego. No será fácil, pero valdrá la pena.
Uno de los temas básicos de esta enseñanza es liberar al niño interior e integrar el espíritu de la alegría infantil en nuestro ser. Esto hará de nosotros personas completas, puesto que al redescubrir la esencia infantil descubriremos quiénes somos realmente. Los Ángeles pueden jugar muy bien con un ser humano integrado; la senda está abierta y ellos pueden guiarnos sin los insípidos bloqueos emocionales de la vida adulta ni la tendencia de complicarlo todo.
Los Ángeles están con nosotros para hacernos más felices y no es necesario complicar innecesariamente un mensaje tan hermoso con una cantidad de artificios, palabras y sistemas de creencias. Debemos liberarnos de la noción ridícula de ser adultos. Esta es la causa principal de la muerte espiritual en personas mayores de doce años. Seamos nosotros mismos – lo cual significa ser uno con el niño interior – y transmitamos alegría a los adultos insípidos que quieren que todo sea tan serio y tan complicado.
El poema siguiente pertenece a un libro muy especial titulado “Cuidemos a los niños”, escrito por Ken Cousens