El poema que leía Mandela en los momentos difíciles. Con este poema os deseo LO QUE A MI MISMA
Aceptacion, Comprension y Amor a todo lo que me llegue minuto a minuto,
Que mis sentidos vayan mas allá, para percibir aunque sea unos momentos mi verdadero hogar, ahi donde realmente me siento en paz, Para Ser capaz de ver en mis hermanos una expresión de Mi padre, de este modo me doy cuenta que está en nosotros, ya que somos parte de el así pues todos somos El, Para sentir ese Amor incondicional por todo y todos ¿ como no amar a mi Padre ? como no amarlo todo? El esta en todo, El ÉS
Más allá de la noche que me envuelve,
negra como un pozo insondable,
agradezco al dios que fuere,
por mi alma inconquistable.
En las garras de la circunstancia
no he gemido ni llorado.
ante las puñaladas del azar
si bien he sangrado, jamás me he postrado. Más allá de este lugar de ira y llantos, acecha la oscuridad con su horror, no obstante la amenaza de los años, me halla y me hallará sin temor. Ya no importa cuán estrecho haya sido el camino, ni cuántos castigos lleve a mi espalda, soy el amo de mi destino: soy el capitán de mi alma.
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