jueves, 23 de junio de 2011

ANTIGUAS PROFECIAS PARA LOS TIEMPOS MODERNOS


Antiguas profecías para los tiempos modernos

Por Bette Stockbauer


A pesar de que la historia haya descrito a las culturas nativas como primitivas y a veces bárbaras, está naciendo en nuestro tiempo una nueva imagen de ellos. El autor francés Pierre Honore examinó minuciosamente los diarios originales de los conquistadores. En ellos hay recopilaciones de lo que estos encontraron en el Nuevo Mundo – grandes ciudades con poblaciones urbanas muy versadas en las artes y ciencias, siguiendo sistemas legales bien organizados. Las excavaciones arqueológicas de la época moderna han verificado estos relatos, desenterrando sofisticadas ciudades y pirámides comparables a las de Egipto.

Aún más importante, los pueblos nativos se están dando a conocer por sí mismos, revelando tradiciones y conocimiento sagrado ocultos hace 500 años cuando llegaron los conquistadores. Ellos hablan ahora porque comprenden la importancia del momento actual. Sus ciencias sagradas les dicen que el mundo se encuentra en un punto decisivo, y que sus elecciones de hoy determinarán el curso futuro de la civilización. Sus profecías les han instruido a adentrarse en el mundo y decirnos los peligros que estamos afrontando. Es importante para nosotros que escuchemos sus voces, ya que hablan desde corazones que han intentado ser fieles a sus enseñanzas sagradas – vivir en la fraternidad y la sencillez, estableciendo armonía con el resto de las personas y con todos los seres vivientes.

Esto es lo que ellos dicen:

Estamos entrando en una época de purificación y podemos esperar ser testigos de un caos y destrucción en todos los reinos de la naturaleza.
Es el momento de la reconciliación de las razas. Las barreras de la religión y la nacionalidad empezarán a desmoronarse mientras las personas se dan cuenta de su unidad esencial.
Debemos reparar el daño causado a la Madre Tierra, la fuente de la vida, y reconocer que todas las cosas vivientes están dotadas de espíritu.
En tiempos futuros veremos el regreso de uno o más de los Grandes Instructores que nos guiarán hacia el futuro.
En su libro The Return of the Pahana (El Regreso del Pahana), Robert Boissière expone la creencia ampliamente mantenida entre los pueblos nativos del inminente retorno de una figura salvadora, y dice que de ninguna forma difiere de la creencia cristiana en una segunda venida. En la legendaria historia de muchas tribus se encuentra el relato de un instructor parecido a Jesús que enseñó los misterios espirituales y la forma ética de vivir la vida. Cuando él partió, dicen, prometió volver en un momento en que la tierra estaría muy agitada, con el fin de guiar a la humanidad hacia el futuro. Es más conocido bajo el nombre de Quetzalcoatl y Kukulcan (ver 'El recorrió las Américas', Share Internacional, agosto/septiembre 1994, pág. 8-13).

Norteamérica
Thomas Banyacya ha recorrido el mundo durante casi 50 años hablando sobre las profecías de su tribu, los Hopi. Durante siglos los Hopi han vivido en uno de los entornos más duros de Estados Unidos – situado sobre una meseta desértica en Arizona. Sus antepasados escogieron este lugar para establecerse porque sabían que mantendría a su pueblo cerca del creador. Ellos continuamente reafirman su dependencia en Dios mediante una serie anual de rituales en los que piden a los espíritus que les suministren todo lo que necesitan.

En 1948 un grupo de ancianos Hopi aceptaron la labor de advertir al mundo de los acontecimientos que predecían las profecías Hopi. Estas mismas profecías les remitieron a dirigirse a la ONU. Costó un esfuerzo de 44 años, pero al final en 1992 se les permitió dirigirse a la Asamblea General (Share Internacional, diciembre 1993, pág.10-12). Este comienzo les llevó a otro encuentro en la ONU en 1993, llamado la "Conferencia del Grito de la Tierra", en la que los líderes de siete naciones dieron a conocer sus profecías.

Las profecías Hopi hablan del regreso de Pahana, su Verdadero Hermano Blanco, quien les dejó en tiempos antiguos, prometiendo volver. Llevan el pelo con flequillo para formar una ventana, dicen, mediante la cual ver a su Hermano Mayor cuando vuelva. También constituye una marca identificadora para que el Hermano Mayor les reconozca.

Alce Negro y Caballo Loco eran líderes de los Sioux Lakota a finales del siglo pasado, un período que significó el diezmo en EEUU de muchos grupos nativos. Cada uno de ellos tenía una visión del futuro.

Alce Negro vio que su pueblo estaría asediado por el hambre, la enfermedad y la guerra. Perderían ánimo y el círculo sagrado de su nación se rompería. Pero él tuvo una visión de su nación reunificada después de siete generaciones, y convertirse en parte del círculo mayor de todas las naciones de la tierra. Luego vio la estrella del amanecer saliendo por el este, y escuchó una voz que decía: "Será un familiar para ellos, y quienes lo vean verán mucho más, porque desde allí viene la Sabiduría; y para aquellos que no lo vean será oscuro". Alce Negro pensó que esto quería decir que un gran Profeta del Este traería un mensaje a su pueblo.

La visión de Caballo Loco predijo la oscuridad que descendió en su pueblo. Contempló la venida de los automóviles y los aviones y las trágicas guerras mundiales de la era moderna. Vio a su pueblo despertar gradualmente después de la última guerra y empezar a bailar de nuevo bajo el Árbol Sagrado. Luego, sorprendentemente, vio que bailando con su pueblo estaban también representantes de todas las razas que se habían convertido en hermanos. Así él predijo que el mundo volvería a ser un todo otra vez, no sólo por su propia nación, sino por todos los pueblos trabajando juntos.

Entre los Lakota, los Crow, los Chippewa y otras tribus nativas americanas, el Búfalo Blanco es uno de los símbolos más sagrados. Representa pureza, sacrificio y un símbolo de que la profecía está siendo cumplida. El Mesías honrado por los Sioux Lakota es la Mujer Cría Blanca de Bisonte, que introdujo la Pipa Sagrada y estableció los cimientos de sus rituales y vida social. Cuando ella partió, se convirtió en un búfalo blanco y prometió regresar algún día. En 1994 nació una cría blanca de bisonte en Wisconsin; en 1996 nació otra en Dakota del Sur. Para los pueblos nativos estos nacimientos han representado una señal para "arreglar el círculo" de las naciones, establecer la fraternidad en la familia del hombre, y regresar a una forma de vida espiritual (Share Internacional, septiembre 1996, pág. 25).

Jake Swamp de la nación Mohawk habla del Pacificador, Deganawida, que unificó las tribus de la Confederación Iroquois. El Pacificador predijo la agitación y la destrucción que acabaría con las vidas y la cultura de las tribus de la Confederación. Pero también vio un tiempo futuro en el que vendría un gran Profeta que sería un Unificador Mundial. Vendría en el mismo espíritu como otros profetas antes que Él, pero renovaría el espíritu del hombre de una forma más generalizada y más inclusiva que en cualquier otro momento anterior de la historia.

En 1969 los Ancianos del grupo Tsalagi/Cherokee de Dhyani Ywahoo decidieron dar a conocer unas enseñanzas que han estado guardadas en secreto desde la conquista. A través de libros, conferencias y talleres, Dhyani Ywahoo está diseminando este conocimiento. Ella dice que su propio linaje Ywahoo fue fundado por un profeta legendario llamado El Pálido, que volvió a encender los fuegos sagrados por todas las Américas. Ella dice: "El Pálido es un ser que se encarna cíclicamente. Viene cuando el pueblo ha olvidado sus procederes sagrados, trayendo recordatorios de la Ley, y las correctas relaciones humanas. Se le espera pronto otra vez, y puede que incluso esté vivo ahora. Eso es bueno".

Australia y Nueva Zelanda
Entre los aborígenes de Australia se cree que cada tribu tiene la responsabilidad de cuidar de una parte del medio ambiente. Ellos creen que los minerales enterrados son una parte vital del entramado energético de la tierra, y están muy preocupados por el uso excesivo de la minería en la actualidad, en especial del uranio. En 1975 los Ancianos se dieron cita en Canberra, pudiendo reunir a más de 350 aborígenes. Los Ancianos advirtieron de los cataclismos que vendrían e instaron a las personas a que salieran al mundo exterior y enseñaran su conocimiento al mundo, con el fin de prepararlo para un tiempo futuro en el que volveríamos a nuestros inicios – cuando todas las culturas existirán como una.

La nación Waitaha dice ser poseedora del más antiguo linaje en Nueva Zelanda. Cuando la nación fue disuelta por guerreros del Pacífico, los Ancianos ocultaron 1.000 años de su historia generacional y enseñanzas de sabiduría, pasando este conocimiento sólo a través de un número muy reducido de personas de cada generación. En 1990 los ancianos observaron en los cielos una configuración que significaba para ellos una señal de que debían sacar a la luz su conocimiento sagrado. Un libro, The Song of Waitaha (La Canción de Waitaha), por Barry Brailsford, contiene estas enseñanzas. En su lengua wai significa agua y taha significa cuenco de calabaza, implicando la idea de un portador de agua, el símbolo de Acuario.

Sudamérica
Los Kogi son una tribu precolombina que viven una existencia aislada en Sierra Nevada de Santa Marta, en Colombia. Son unos de los pocos que escaparon de la destrucción de los europeos y todavía viven sus vidas conforme a su antigua herencia espiritual. Alarmados por la excesiva explotación de la minería y la desforestación de nuestros tiempos modernos, en 1990 (por una sola y única vez) permitieron a un equipo de televisión de la BBC visitarles y relatar sus vidas. Haciéndose llamar "Los Hermanos Mayores", desearon emitir una advertencia urgente a los "hermanos pequeños". Desde su territorio en lo alto de la montaña ven que la tierra se está secando, que las fuentes de agua que deberían proporcionar el sustento a las llanuras ya no tienen vitalidad. Nos advierten de que la tierra se está muriendo y, "cuando la Tierra muere, todos morimos".

Willaru Huarta creció en las selvas de Perú, estudiando con los chamanes. El dice que las profecías de los incas nativos Quechua predijeron que la venida del hombre blanco traería 500 años de materialismo y desequilibrio. Pero ahora dicen que esa era está tocando a su fin y que la Era de Acuario "señalará el regreso de la Luz al planeta y el amanecer de una era dorada. Vivimos en un momento de cumplimiento de la profecía." Ahora él viaja por todo el mundo enseñando su sencillo mensaje: "La humanidad debería curarse a sí misma y proporcionar ayuda a los pobres. Regeneraos a vosotros mismos con luz, y luego ayudad a aquellos que tienen pobreza de alma. Retornemos al espíritu interno, a quien hemos abandonado mientras buscábamos la felicidad en otro lugar".

Los Q'ero son otro grupo peruano que están dando a conocer sus profecías, viajando por las naciones industrializadas para celebrar ceremonias y compartir su visión del futuro. (Share Internacional, enero/febrero 1997, pág. 43-45).

Profecía Maya
Hunbatz Men habla de una antigua confederación de ancianos nativos americanos compuesta de representantes procedentes de lugares desde Nicaragua hasta el Círculo Ártico. Se han estado reuniendo durante miles de años y continúan haciéndolo en la actualidad. Antes de que vinieran los españoles, la confederación decidió ocultar las enseñanzas mayas, confiando su cuidado a ciertas familias. Hunbatz Men es el heredero de ese linaje. En su libro Secrets of Mayan Science/Religion (Secretos de la Ciencia/Religión Maya), revela las enseñanzas que se corresponden a las enseñanzas hindúes y budistas sobre astrología, meditación, y la raíz septenaria de la creación.

El habla de Kukulcan y Quetzalcoatl, no tanto a la luz de un regreso esperado, sino en términos de la posibilidad de que cada uno de nosotros puede alcanzar ese mismo estado excelso al hollar el sendero de consecución del conocimiento. "Ser un Quetzalcoatl o un Kukulcan es conocer las siete fuerzas que gobiernan nuestro cuerpo – no sólo conocerlas sino también utilizarlas y comprender y entender su íntima relación con las leyes cósmicas y naturales. Debemos comprender los ciclos largos y cortos y las leyes solares que sustentan nuestras vidas. Debemos saber cómo morir, y cómo nacer".

Don Alejandro Oxlaj es un sacerdote de séptima generación de Guatemala y dirige el Consejo de Ancianos Quiche Maya. Ha viajado por toda Norteamérica, comparando las profecías nativas de las diferentes tribus. Para el próximo año espera registrar y publicar, por vez primera en 500 años, las profecías mayas de su pueblo. (Share International, diciembre 1996, pág. 21).

Lo más interesante de todas estas declaraciones es su consistente tono reconciliatorio. Los grupos nativos están abriendo sus puertas a personas sin distinción de color, haciéndose llamar Guerreros Arco Iris. Sus ancianos les han instado a que "recordaran las instrucciones originales" cuando el creador le dio a cada tribu un mandato a seguir. Ese mandato les ha enseñado que ahora es momento de curar el pasado, a pesar de los siglos de dolor y persecución. Ahora es momento de unirse juntos y trabajar en armonía para rehabilitar el planeta y establecer una era de alineamiento y paz.

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